La dulzura hecha Rock

Anoche, 8 de marzo de 2006, fui testigo de la segunda visita, tercera presentación, de los holandeses The Gathering en Chile. Me decidí a ir a última hora. Soy fan de la banda hace más de 8 años, y ya me los había perdido el 2004, cuando repletaron el Teatro Providencia 2 noches seguidas.

No tenía demasiadas expectativas, porque se habían ido hacia un sonido un poco meloso en los últimos discos, dejando de lado la veta del rock, que es la que me dejó loco por allá por 1996 cuando me devoré el Mandylion y el Nighttime Birds.

La cosa es que llegué a un Teatro Caupolicán renovado (previa compra de entradas en la reventa, a 10 lucas), con cerca de 5 mil personas eufóricas, y todo cambiado. Para mí, el mejor recinto para ver a una banda en vivo. Hasta los baños ahora son de lujo!!

The Gathering hizo su aparición con nada más ni nada menos que Liberty bell, temón. Y quedó la grande. Anneke es sencillamente la mejor voz femenina de los últimos años. Además de ser una diva en el escenario y de acariciar oídos con su voz, esta mujer de 32 años es muy, muy linda. Estaban todos los hombres locos, hay que decirlo. No faltaron los “Te amoooo” ó “I love youuuuu”, entre la multitud.

Más encima ella estaba de cumpleaños, así que ver al Caupolicán con 5 mil personas coreando el “cumpleaños feliz” fue emocionante.

Musicalmente hablando, me dejaron a mí y a la Elvy, mi "Nudito", con la boca abierta. Estuvo notable, buenísimo, sólido. Lamentablemente, Anneke estaba con problemas en la garganta, cosa que nos advirtió en perfecto español apenas iniciado el show. Pero no eso no mermó su performance, sólo que se escuchaba a menor volumen. Sus movimientos, bailes, coqueteos, sonrisas y diálogos con el público hacía que 10 mil ojos se fijaran sólo en ella.

Cuando llegó el momento de On Most Surfaces fue el éxtasis. Grité, bailé, canté. La gente estaba extasiada, esa es la palabra. Y fui uno más. Es que los podría haber escuchado 4 horas sin bajar del clímax. In Motion #1 estuvo sublime. Y Saturnine, con el coreo de la gente, me dejó loco.

Faltaron temas. La hora cuarenta se me pasó volando. Pero no hay plata mejor invertida que para ir a ver a The Gathering. Desde la organización del evento, la limpieza y excelente sonoridad del recinto, hasta la voz PRO de Anneke, pasando por una excelente guitarra y un teclado hipnotizante, habría pagado mucho más por verlos.

¡Gracias The Gathering!

p.d. Se me olvidaba algo. Si no conocen TG y quieren escucharlos, basta con que me dejen un comentario y les mando por mail 5 ó 10 canciones. :-)
O también me pueden enviar un mail a chuqui@gmail.com... qué tanto.